Se entiende que los blogueros ultraderechistas de Estados Unidos empleen esos términos, pero sorprende cómo la prensa española ha enfocado la noticia del nombramiento de Miss Estados Unidos, la libanesa-americana Rima Fakih de 24 años. “¿Miss Terrorista?”, se interrogaba elmundo.es en su edición de ayer. “Escándalo por la conexión de Miss EEUU con Hezbolá”, se lanzaba El País sin ofrecer más pruebas que las declaraciones de Debbie Schlussel, una conocida bloguera que se define en su perfil de Twitter como “orgullosa americana, conservadora, escritora, abogada, crítica de cine y observadora cultural, periodista de investigación, experta en terrorismo y orgullosa judía”.
A propósito de dicho tratamiento informativo hay varios matices que señalar. Calificar a Fakih de ‘Miss Terrorista’ –al menos hacerlo en Europa- es un error de base, dado que Hizbula no forma parte de la lista de grupos terroristas elaborada por la UE, y de ahí que se consideren legítimas las reuniones de líderes europeos –escasas aunque existentes, como la protagonizada por el propio Miguel Angel Moratinos en 2007- con responsables del Partido de Dios.
Incluso si el movimiento chií libanés hubiera sido incluido en dicha lista europea, acusar a una joven que se pasea en biquini o embutida en traje de noche de ‘terrorista islámica’ y de estar vinculada al grupo chií no sólo es difamatorio: también demuestra una enorme ignorancia sobre la base ideológica que sustenta a Hizbula y resulta injusto: incluso si, como afirma Schlussel, hubiese tenido familiares miembros del movimiento islámico, eso no implica que ella haya cometido delito alguno o incluso que simpatice con el grupo armado libanés.
La supuesta ‘prueba’ que manejan los blogueros derechistas es que comparte apellido con miembros de Hizbula. Efectivamente, es así. Es fácil atribuirle un primo en la organización, dado que ésta es ingente –cada vez más- y en el Líbano la población es escasa y los apellidos suelen ser comunes. Una buena prueba de ello son los ‘errores’ que han llevado en los últimos años al Ejército israelí a secuestrar a pastores libaneses del sur apellidados Nasrallah pretendiendo que fueran familiares del líder del Partido de Dios, para después descubrir que no tenían el más mínimo lazo sanguíneo con el jeque.
Algo parecido pasa con Rima Fakih. Incluso si un pariente cercano fuera miembro o líder de Hizbula, ¿se podría tachar de terrorista a la joven? ¿Sería justo responsabilizarla de la actitud de su pariente? No se ha hecho con los hijos de Osama bin Laden que se han distanciado de su padre, ni tampoco con los hermanos del líder de Al Qaeda que hoy dilapidan sus fortunas saudíes por el mundo.
La nueva ‘Miss EEUU’ nació en Srifa, una localidad situada en el sur del Líbano, controlado por Hizbula. Criada en una familia chií y cristiana, sus padres se trasladaron a Nueva York cuando sólo contaba con siete años. Allí ingresó en una escuela católica, en la que estudió hasta 2003, cuando se trasladó a Michigan. Graduada en Económicas por la Universidad de Michigan, Rima terminaría afincándose en Dearborn, donde participó en concursos como ‘Stripper 101’, una competición de baile gogó que la libanesa ganó demostrando su soltura en la barra. No le cuesta posar en biquini ni en lencería, y ese no es el estilo de Hizbula ni de una familia conservadora chií, como la están presentando algunos medios.
Su familia en el Líbano, entrevistada por France Presse, se muestra orgullosa de su más bello miembro y esperan que su nombramiento rompa estereotipos: “Los occidentales nos pintan a los chiíes como terroristas y asesinos. No es verdad: amamos la vida, el amor, la belleza y sobre todo la belleza de espíritu”, explicaba su tía Afifa Fakih Said. A esta mujer velada y trilingüe le ofenden las acusaciones políticas. “En esta familia no tenemos lazos con ningún partido político. Su padre les ha enseñado a no diferenciar entre cristianos y musulmanes”.
En cambio, en el Partido de Dios no ha sentado bien la noticia de que una libanesa haya ganado el certamen. “Tenemos un punto de vista diferente en lo que se refiere a la forma de presentar a la mujer. ¿Debemos presentarla como cuerpo o como valor humano? Los criterios con los que se percibe y se juzga a la mujer en Occidente son diferentes a los nuestros”, criticaba el diputado de Hizbulá Hassan Fadlalah en la televisión libanesa. Da lo mismo lo que diga Fadlallah porque el daño ya está hecho: en Google Search, “Rima Fakih Hizbulá” aporta más de 29.000 resultados.
http://www.elmundo.es/blogs/elmundo/orienteproximo/2010/05/19/sobre-biquinis-y-hizbula.html
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