lunes, 18 de abril de 2016

Pineda prometió "plegar velas" contra la Infanta y pasó de pedir 2 millones a 3 por "gastos procesales"

"Tendrá que plegar velas. Hacer lo que deba hacerse, no lo que le guste a ella, aparte de que su momento de gloria ya lo ha tenido". Quien habla así es el presidente de Ausbanc, Luis Pineda, y la persona a la que se refiere es abogada Virginia López Negrete, que ejerce la acusación contra la Infanta Cristina en nombre de Manos Limpias en el caso Nóos. La conversación se grabó el pasado 3 de marzo y hace referencia a las gestiones emprendidas por la asociación de usuarios bancarios y el sindicato Manos Limpias para retirar la acusación que pesa sobre la hermana del Rey Felipe VI a cambio de tres millones de euros.
En el auto de prisión incondicional dictado por el juez Santiago Pedraz contra Pineda y el secretario general de Manos Limpias, Miguel Bernard, así como de comparecencias quincenales para tres de los más estrechos colaboradores del primero, se desmenuzan cuatro casos de extorsión y amenazas, en los que se exigen fuertes cantidades de dinero a cambio de retirar la acusación que alguna de los dos colectivos plantea en los juzgados.
El detalle de las maniobras que realizaron en el caso Nóos es muy elocuente. El primer contacto se produce el pasado 29 de febrero. Luis Pineda llama al director general de la Fundación La Caixa para proponerle negociar la retirada de la acusación popular de Manos Limpias del caso y le cita como ejemplo, como ya lo hizo con Unicaja, que llegó a pagar a Ausbanc un millón de euros para que dejara de acusar a su presidente, Braulio Medel, en el caso de los ERE.
Tras declarar la Infanta Cristina ante el tribunal de Palma de Mallorca que la juzga, Pineda y el Francisco Javier Castro-Villacañas lo comentan por teléfono. Es el 3 de marzo y Pineda no duda en decir que la abogada de Manos Limpias "se ha pasado", para a continuación añadir que "tendrá que plegar velas, tío, y punto". Y así "hacer lo que deba hacerse, no lo que guste a ella (la letrada), aparte de que su momento de gloria ya lo ha tenido.
Unos días después, el 14 de marzo, el propio Pineda -al que se imputan los delitos de amenazas, extorsión, estafa, fraude en las subvenciones, administración desleal y organización criminal- se puso en contacto con el subdirector general de la asesoría jurídica del Banco Sabadell ofreciéndole que mediara para lograr el archivo de la causa contra la infanta. El subdirector denunció el 29 de marzo el intento de extorsión sufrido, que en ese momento, era de dos millones de euros. El 30 de marzo, él y el abogado de la Infanta, Miquel Roca, denunciaron lo ocurrido. El precio por desimputar a la infanta había subido a tres millones por los gastos procesales sufridos.