El Consejo de Seguridad aprueba por unanimidad el desarme químico de Siria
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó este viernes por unanimidad la resolución para destruir el arsenal químico de Siria. Como quería Rusia, si el régimen de Bachar Asad incumple el trato, hará falta otro texto para autorizar un castigo militar.
"La diplomacia es tan poderosa que puede
desactivar pacíficamente las armas de la guerra", dijo John Kerry,
secretario de Estado y quien hace sólo unas semanas fue el encargado de
presentar los argumentos a favor de la intervención militar de EEUU
contra Asad.
La resolución de la ONU es la primera que apoya la negociación política entre el régimen y la oposición. Tras varios intentos fallidos, Ban Ki-moon aseguró que el objetivo ahora es celebrar una
conferencia de paz a mediados de noviembre. "Éstas son las primeras
noticias esperanzadoras sobre Siria en mucho tiempo", dijo Ban tras la
aprobación de la resolución 15-0.
Después de un mes en que casi ataca Siria, el presidente Barack Obama
presumió este viernes del acuerdo para el desarme químico. Pero ni la
ONU ni las grandes potencias piden ya castigos por el asesinato de más de 1.400 personas con gas sarín el 21 de agosto mientras se multiplican los casos conocidos de uso de armas con sustancias tóxicas prohibidas.
El acuerdo para la destrucción del arsenal químico de Siria, aprobado
formalmente este viernes, es el logro en el que se quiere concentrar
ahora el presidente de Estados Unidos. "Potencialmente es una enorme victoria para la comunidad internacional",
dijo Obama, que asegura que el pacto sólo se ha logrado gracias a sus
amagos de ataque militar, interrumpidos por él mismo para buscar el
apoyo del Congreso y después para intentar la negociación sobre el
arsenal. "Siempre he dicho que prefería resolver esto diplomáticamente",
añadió. El acuerdo, según él, "va más allá de lo que se podría haber
conseguido a través de cualquier acción militar".
Obama presumió de que el pacto coincide con el mensaje de "acción"
que quiso transmitir en su discurso ante la Asamblea General de Naciones
Unidas el martes, si bien reconoció que aún queda "mucho trabajo" por
hacer.
Operación complicada
La operación para destruir el arsenal químico de las toneladas de gas
sarín, gas mostaza y VX en manos de Asad no será fácil y aún menos en
plena guerra civil. Y el proceso que comienza ahora dejará en segundo
plano los posibles castigos a Asad.
Un par de horas antes que el Consejo de Seguridad, la organización
para la prohibición de armas químicas aprobó el acuerdo para la
destrucción del arsenal militar de gases venenosos, aunque lo hizo sin
insistir en los crímenes de guerra cometidos.
El texto no incluye la amenaza del uso inminente de la fuerza si Asad no cumple con el desarme
El Consejo de Seguridad también evitó señalar al culpable
de la muerte de al menos 1.429 personas, entre ellas más de 400 niños,
intoxicadas por gas sarín. El texto, como quería Rusia, no incluye la
amenaza del uso inminente de la fuerza si Asad no cumple con el desarme o
no deja pleno acceso a los inspectores. Si Asad viola el trato, sería necesaria otra resolución, improbable por el derecho de veto de Rusia y China.
Mientras, los expertos de Naciones Unidas han vuelto a Siria para
seguir investigando el uso de gas sarín en al menos otras seis
ocasiones, tres de ellas después del ataque del 21 de agosto. Según la
ONU, se trata de dos incidentes el 22 y el 24 de agosto en dos barrios
al este de Damasco y de un tercero al sur de la ciudad el día 25. Los
otros tres ataques fueron esta primavera.
Los inspectores harán un informe sobre sus
hallazgos, pero sus conclusiones difícilmente tendrán repercusiones para
el régimen, entre otras cosas porque su mandato les impide apuntar al
responsable.
Su informe sobre el ataque del 21 de agosto dio algunas pistas, como
que el tipo de misiles utilizados con el gas sarín sólo los tiene el
régimen o el ataque se hizo desde zonas que controla el Gobierno a
suburbios de Damasco resistentes de la oposición. Pero Ban reconoce que
poco que se puede hacer con ese informe. Según él, depende de "otros".
Colaboración de Asad
La comunidad internacional necesita ahora la cooperación del Gobierno
de Asad para la destrucción del arsenal. De aquí a noviembre Damasco
debe nombrar a un representante encargado de negociar con los expertos
de la organización para la prohibición de armas químicas y tiene que facilitar el acceso a los sitios donde están las sustancias tóxicas, los misiles para contenerlas y las plataformas para lanzarlas.
Según el acuerdo, la destrucción de las armas se debería hacer fuera
de Siria, si bien el transporte es peligroso por los riesgos de
accidente o de que las sustancias caigan en manos de Al Qaeda, que está
entre los grupos extremistas que luchan contra Asad.
El objetivo es destruir el arsenal en la primera mitad de 2014.
La organización para la prohibición de armas químicas, con sede en La
Haya, es la responsable, pero ya dice que necesitará la ayuda de los
expertos de los cincos miembros del Consejo de Seguridad (Estados
Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia y China) y más dinero.
Aunque se supone que Siria debe sufragar los gastos, el grupo
internacional ha empezado a pedir donativos de los 41 países miembros de
su consejo ejecutivo, que se turnan cada dos años y entre los que ahora
están Estados Unidos, Irán, Libia, Pakistán, Rusia, Francia, Alemania,
Reino Unido o Italia. España no está ahora en el consejo.
Reino Unido fue el primero en anunciar este viernes su ayuda: tres millones de dólares (unos 2,2 millones de euros).
http://www.elmundo.es/elmundo/2013/09/28/internacional/1380328883.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario