¿Por qué alucinaba Chopin?
Sus creaciones musicales están cargadas de melancolía y muchos de sus escritos reflejan el miedo que le causaba ver pequeños seres que, en una ocasión, le impidieron seguir tocando el piano. Un grupo de expertos españoles sostiene, en 'Medical Humanities', que esas alucinaciones que sufría el maestro Chopin podrían guardar relación con una epilepsia del lóbulo temporal que nunca se le diagnosticó.
Tal y como ha quedado escrito en los anales de la música, Frédéric Chopin fue el prototipo de artista romántico, melancólico y castigado por una frágil salud que le costó la vida a los 39 años, en 1849 (presumiblemente, falleció por una fibrosis quística).
Conscientes del cliché en el que se presenta la figura del músico, Manuel Vázquez y Francisco Brañas, del Complejo Hospitalario Xeral-Calde de Lugo (Galicia), decidieron investigar qué hay de real y qué de romántico en esas visiones que atormentaban a Chopin.
Las cartas de Chopin y los textos de Sand
A partir de las misivas enviadas por el artista polaco y de los escritos de su compañera George Sand se puede entrever la naturaleza de las alucinaciones. Y es precisamente esta información (sobre la duración, el tipo de seres que veía, los sentimientos que tenía...) la que resultó clave para que estos dos expertos españoles ofreciesen un nuevo diagnóstico diferencial.
Las alucinaciones de Chopin, en las que a menudo veía a seres liliputienses, "duraban desde algunos segundos a varios minutos. Su estado de consciencia era normal y no se mostraba adormilado. Los episodios ocurrían sobre todo por las noches o cuando tenía fiebre y, a veces, le produjeron ansiedad o miedo", explican Vázquez y Brañas.
Y añaden que, aunque el maestro no contaba con ningún déficit neurológico ni de oído, padecía insomnio y presentaba una sensación de 'jamais vu' (no sabía dónde estaba).
Por todo ello, lejos de otros diagnósticos como el de trastorno bipolar, "nuestra principal conjetura es que su estado alucinatorio fue causado por una epilepsia del lóbulo temporal".
Como aclara Manuel Vázquez a ELMUNDO.es, este tipo de epilepsia es como la que padecían Santa Teresa o Dostoievski. Eso sí, "en estos casos era de tipo 'místico', ya que el ataque epiléptico se interpretaba como algo placentero".
http://www.elmundo.es/elmundosalud/2011/01/24/portada/1295892222.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario