El país formalizó su candidatura en 1959 y 51 años después sigue congelada
En 2004 se abrieron formalmente las negociaciones
'Ningún país candidato estaba totalmente preparado cuando fueron integrados'
Francia y Alemania son los que más oposición ponen a su entrada
Turquía pasaría a ser el segundo miembro más poblado de la UE
"En el infierno Sísifo fue obligado a empujar una piedra enorme cuesta arriba por una ladera empinada, pero antes de que alcanzase la cima de la colina la piedra siempre rodaba hacia abajo, y Sísifo tenía que empezar de nuevo desde el principio" (Odisea, XI, 593)
El 31 de julio de 1959 el entonces primer ministro turco Adnan Menderes formalizó la solicitud de adhesión a un pequeño bloque que reunía a seis países de Europa Occidental: Alemania, Francia, Italia, Bélgica, Holanda y Luxemburgo; Turquía se convertía así en el primer candidato oficial, una candidatura que sigue congelada 51 años después.
"No nos dejan entrar pero tampoco cierran la puerta para que estemos atados a ellos", cuenta Mehmet Perinçek, profesor de la Universidad de Estambul.
El reconocimiento de tal candidatura no llegó hasta 1987, cuando ya habían pasado décadas del acuerdo de asociación (Ankara, 1963 y 1970). El tiempo siguió transcurriendo, Turquía se hizo presente en todas las organizaciones europeas e incluso en la OTAN, pero permaneció a las puertas de la UE. "Turquía no está en Europa porque no ha acabado sus reformas democráticas, hay que cumplir con los criterios", sostiene Akim Özçer, Diplomático y especialista en las relaciones turcoespañolas."Ningún país candidato estaba totalmente preparado cuando fueron integrados, ni siquiera España, pero con Turquía es diferente, con Turquía van a inspeccionar de cerca que cumple con cada criterio y eso necesita tiempo", explica Cengiz Aktar, columnista y profesor de la Universidad Bahçesehir.
'No puede esperar siempre'
La candidatura turca fue formalmente reconocida en la Cumbre de Helsinki de 1999; en la Cumbre de Copenhage de 2002 se establecieron los criterios de adhesión y en 2004 se abrieron formalmente las negociaciones, desde entonces, no ha habido prácticamente ningún progreso (apenas se han abierto 11 de los 35 capítulos a negociar).
"Si miramos a lo que ha alcanzado Turquía en cuanto a reformas democráticas y Derechos Humanos es obviamente insuficiente para ser miembro de la UE, pero por otro lado, si revisamos el proceso de adhesión de los países del Este ninguno cumplió completamente estos criterios, especialmente los dos últimos", asegura Hakan Yilmaz, Decano de la Facultad de Relaciones Internacionales de la Unversidad del Bósforo.
Reino Unido, Irlanda, Dinamarca (1973), Grecia (1981), España y Portugal (1986), Austria, Finlandia, Suecia (1995), Eslovaquia, Eslovenia, Rep. Checa, Estonia, Letonia, Lituania, Hungría, Malta, Polonia y el Chipre griego (2004), Rumania y Bulgaria en 2007; 21 países han entrado desde que Turquía formalizara su candidatura, y como mínimo otros tres países más entrarán, Islandia, Croacia y Serbia.
"Yo no creo que Turquía pueda esperar siempre. Considero que Turquía es un país moderadamente importante y que económicamente no necesita a la UE. La gente debe de entender que apoyar la adhesión de Turquía significa apoyar a su sociedad civil, a las mujeres turcas y a todas las fuerzas progresistas de Turquía", enfatiza Fatmagul Berktay, socióloga de la Universidad de Estambul.
El apoyo a la UE se resiente en Turquía, según el Eurobarómetro, los partidarios de la adhesión han pasado del 71 al 42% en Turquía en los últimos cinco años, aunque según varios 'thinktanks' turcos el apoyo real no supera el 30%. "Las estadísticas reflejan el estado de frustración, pero una nueva señal de Europa subirá el apoyo" asegura el abogado kurdo Irfan Güler, para quien "Turquía entrará a pesar de la oposición de algunos países".
La oposición, el tamaño
Esos países son Francia y Alemania. Turquía tiene 72 millones de habitantes, por lo que pasaría a ser el segundo miembro más poblado de la UE, tras Alemania (81 millones), recortando consecuentemente poder político a los dos pesos pesados de la Unión. En Alemania además viven 3 millones de emigrantes turcos, algo que muchos agitan como un peligro "vendrán otros tres millones", o "¿si no podemos integrar 3 millones ahora cómo vamos a integrar 72 millones entonces?".
No obstante, existen cada vez menos motivos para pensar en la llegada de una avalancha de trabajadores turcos. La renta per cápita de Turquía ha pasado de 3.000 a 12.000 dólares en los últimos 8 años y las inversiones extranjeras se han multiplicado por 20 en ese mismo periodo de tiempo. "Es exactamente lo contrario, como pasó con España muchos volverán", asegura Aktar; "No hay nada mejor para integrar a los emigrantes turcos que integrar a Turquía en la UE", defiende Yilmaz.
"Francia no sabe cómo tratar con las minorías religiosas, ellos tienen problemas para integrar a los musulmanes y no se dan cuenta de que la llegada de Turquía les ayudará a comprender cómo vivir con musulmanes", añade Aktar, "el tema turco se ha convertido en una de las credenciales de la derecha en Francia y en Alemania", complementa.
Entre tanto Turquía sigue haciendo reformas, ahora toca la Constitución, después Chipre... en 2023, aniversario de la fundación de la República turca, Sísifo volverá a estar cerca de la cima. ¿Lo dejarán caer?
http://www.elmundo.es/elmundo/2010/04/23/union_europea/1272025222.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario