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domingo, 12 de febrero de 2012

Vinculan al vicepresidente del Gobierno argentino con un supuesto negocio ilícito

El vicepresidente argentino, Amado Boudou, junto a Cristina Fernández. | Efe

Vinculan al vicepresidente del Gobierno argentino con un supuesto negocio ilícito

El 'delfín' de la Presidenta, que a partir de 2015 aspira a sucederla en la Casa Rosada y hasta diciembre pasado fue ministro de Economía, supuestamente habría montado desde las sombras un apoderamiento de Ciccone Calcográfica, una imprenta en proceso de quiebra que producía moneda, pasaportes, bonos, y hasta matrículas de autos para el Estado, según informaron la radio Mitre y los diarios 'Clarín' y 'La Nación' (opositores).
Una vez que la Justicia decretó la quiebra de Ciccone también dispuso que la compañía pudiera ser alquilada. Y el locatario resultó ser un fondo de inversiones sin historia en el mercado local, The Old Fund SA, constituido como sociedad con sólo 30.000 pesos (6.000 euros). La prensa destapó que el presidente de la compañía es Alejandro Paul Vandenbroele, amigo de Boudou desde hace décadas.
Vandenbroele "fue beneficiado por resoluciones judiciales impulsadas por el Gobierno", aseguró 'Clarín' y reveló que "la semana pasada, la Casa de Moneda recomendó al Banco Central que la ex Ciccone imprima la mitad de la provisión de billetes de 100 pesos que se utilizarán este año. Es un negocio de alrededor de 50 millones de dólares".
Laura Muñoz, ex esposa de Vandenbroele, aseguró que su marido le confesó en 2009 que había empezado a trabajar con Boudou: "Me dijo que estaba haciendo cosas fraudulentas con él, que se iba a quedar con dinero que no era de él, que se trataba de coimas (sobornos)". "Mi esposo es testaferro de Boudou, él trabaja directamente para el Gobierno", dijo en el programa de radio 'Lanata Sin Filtro'.
"Alejandro conocía a Boudou y a José María Nuñez Carmona (socio del vicepresidente) de cuando eran jóvenes, de las vacaciones en Mar del Plata. Iban a la playa juntos y salían de noche a bailar", agregó la mujer y señaló que últimamente "me amenazaron, entraron a robar a mi casa, golpearon de noche mi persiana y me dijeron: 'Cállate, puta'".
Por su parte, 'La Nación' informó de que en su nueva etapa Ciccone ha recibido supuestos favores tributarios de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip). También descubrió que quien para el fisco aparece como 'presidente' del fondo de inversión controlante de The Old Fund SA es, en verdad, testaferro: un jubilado bonaerense de 75 años que cobra la pensión mínima, 220 euros.

Un presidente ficticio

"¿Que yo qué tengo con Boudou? ¡Ja, ja, ja! ¿O sea que soy millonario?", preguntó el septuagenario Carlos Raúl Schneider al periodista que se personó en su humilde casa del conurbano bonaerense y le notificó que era presidente de la sociedad extranjera Tierras International Investments CV, constituida en Holanda con firmas de dos ignotas mujeres de las Antillas, supuestas prestanombres.
"¿Así que soy el presidente de una empresa internacional? ¿Vos me estás jodiendo?.... mira que tengo mis problemas de corazón, ¿eh?", volvió a preguntar una y otra vez Schneider al hombre de prensa y por las dudas dejó claro que "a mí que no me jodan, si viene alguien lo cago a tiros".
En los últimos días, Boudou y sus presuntos testaferros fueron denunciados penalmente ante la Justicia federal, por los supuestos delitos de "violación de los deberes de funcionario", "negociaciones incompatibles con la función pública" y "malversación de caudales públicos". Hasta ahora la Presidenta, Boudou ni nadie del Gobierno han comentado públicamente el asunto.
Este sábado se informó de que el vicepresidente fue sometido a una intervención quirúrgica por apnea del sueño y en el día recibió el alta médica. "Estamos tomando helado", dijo su mujer en la red social Twitter.

http://www.elmundo.es/america/2012/02/11/argentina/1328980535.html

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