El juez deja en libertad a Jordi Pujol Ferrusola sin medidas cautelares
El primogénito del 'expresident' niega ante el juez el cobro de comisiones ilegales
Jordi Pujol Ferrusola, el hijo mayor del expresidente de la
Generalitat, ha negado este lunes ante el juez haber cobrado comisiones
ilegales de la Generalitat, y ha atribuido el dinero recibido de
empresas contratistas de la Generalitat (cerca de ocho millones de euros
en ocho años por servicios variopintos) a trabajos efectivamente
realizados, según fuentes jurídicas. Pujol Ferrusola ha abandonado la
Audiencia Nacional a primera hora de la tarde tras responder durante
cinco horas a las preguntas del magistrado de la Audiencia Nacional,
Pablo Ruz, y de la Fiscalía Anticorrupción sobre el origen de su
fortuna. Tras el interrogatorio, Pujol Ferrusola ha salido del tribunal
en un taxi, acompañado de su abogado. Ni la Fiscalía ni la Abogacía del
Estado han reclamado medidas cautelares contra él, por lo que el juez no
las ha adoptado.
Jordi Pujol Ferrusola entró esta mañana discretamente en la Audiencia Nacional, acompañado de su abogado, Cristóbal Martell y una tercera persona sin identificar, para declarar como imputado por el cobro de más de ocho millones de euros a distintas empresas con intereses en Cataluña por trabajos que no están debidamente justificados. Pujol Ferrusola ha contestado durante cuatro horas a las preguntas del magistrado, y durante otra hora más a las cuestiones del resto de partes en el proceso: Fiscalía, Abogacía del Estado y su defensa. Tanto las preguntas como las respuestas han sido precisas y exhaustivas, según fuentes presentes en el interrogatorio. Las mismas fuentes subrayan que la mayoría de los cobros recibidos son de la época en la que gobernaba el tripartito, y de Ayuntamientos del PSC. El hijo mayor del expresidente de la Generalitat ha declarado en castellano, a pesar de que se había dispuesto un traductor para que pudiera hacerlo en catalán.
Su exmujer, Mercé Gironés, imputada por los mismos delitos que Pujol Ferrusola (al aparecer en muchas de las operaciones investigadas por Ruz) ha terminado de declarar en torno a las 19.00. Estaba citada a las 16.00, aunque su declaración comenzó más tarde, tras el receso posterior al interrogatorio de Pujol Ferrusola. El juez llamó a ambos a declarar cuatro días después de que el expresidente de la Generalitat confesara el 25 de julio en un comunicado que había mantenido oculta una fortuna en el extranjero, que vinculó a una herencia de su padre.
Ante el juez, Pujol Ferrusola ha sido interrogado sobre los 118 movimientos de dinero por 32,4 millones de euros que él y su esposa hicieron entre 2004 y 2012 a través de tres bancos distintos (BBVA, Mediolanum y Credit Suisse) con salida o destino en Andorra, Luxemburgo, Croacia, Argentina, Uruguay, Suiza, Estados Unidos, México, Francia, islas Caimán, Reino Unido, Liechtenstein y Gabón. En Argentina y México, Jordi Pujol Ferrusola invirtió grandes cantidades de dinero en un hotel y un puerto. Al acudir como imputado, el hijo del expresidente catalán no está obligado a contestar a las preguntas que se le formulen ni tiene obligación de decir verdad, como sí sucede con los testigos.
Pujol Ferrusola, con el rostro oculto tras unas gafas de sol y un traje gris marengo, salió del taxi tan velozmente que nadie fue capaz de identificarlo en un primer momento. En la puerta de los juzgados le esperaban medio centenar de periodistas y un fuerte despliegue policial.
El juez está todavía en espera de recibir la información reclamada a Andorra sobre las cuentas del hijo del expresidente de la Generalitat, y sobre la que la juez que tramita la comisión rogatoria ha advertido a Ruz que sólo se la podrá facilitar si vincula los delitos de blanqueo y fiscales a otros de corrupción como tráfico de influencias o cobro de comisiones ilegales.
Aprovechando la comparecencia de Pujol Ferrusola, el portavoz adjunto en el Congreso del PP, Rafael Hernando, ha apuntado que aunque algunos políticos catalanes han lanzado el mensaje de que "España nos roba", lo hicieron para ocultar que quienes robaban en realidad "eran ellos", una actitud que ha considerado doblemente grave.
Jordi Pujol Ferrusola entró esta mañana discretamente en la Audiencia Nacional, acompañado de su abogado, Cristóbal Martell y una tercera persona sin identificar, para declarar como imputado por el cobro de más de ocho millones de euros a distintas empresas con intereses en Cataluña por trabajos que no están debidamente justificados. Pujol Ferrusola ha contestado durante cuatro horas a las preguntas del magistrado, y durante otra hora más a las cuestiones del resto de partes en el proceso: Fiscalía, Abogacía del Estado y su defensa. Tanto las preguntas como las respuestas han sido precisas y exhaustivas, según fuentes presentes en el interrogatorio. Las mismas fuentes subrayan que la mayoría de los cobros recibidos son de la época en la que gobernaba el tripartito, y de Ayuntamientos del PSC. El hijo mayor del expresidente de la Generalitat ha declarado en castellano, a pesar de que se había dispuesto un traductor para que pudiera hacerlo en catalán.
Su exmujer, Mercé Gironés, imputada por los mismos delitos que Pujol Ferrusola (al aparecer en muchas de las operaciones investigadas por Ruz) ha terminado de declarar en torno a las 19.00. Estaba citada a las 16.00, aunque su declaración comenzó más tarde, tras el receso posterior al interrogatorio de Pujol Ferrusola. El juez llamó a ambos a declarar cuatro días después de que el expresidente de la Generalitat confesara el 25 de julio en un comunicado que había mantenido oculta una fortuna en el extranjero, que vinculó a una herencia de su padre.
Ante el juez, Pujol Ferrusola ha sido interrogado sobre los 118 movimientos de dinero por 32,4 millones de euros que él y su esposa hicieron entre 2004 y 2012 a través de tres bancos distintos (BBVA, Mediolanum y Credit Suisse) con salida o destino en Andorra, Luxemburgo, Croacia, Argentina, Uruguay, Suiza, Estados Unidos, México, Francia, islas Caimán, Reino Unido, Liechtenstein y Gabón. En Argentina y México, Jordi Pujol Ferrusola invirtió grandes cantidades de dinero en un hotel y un puerto. Al acudir como imputado, el hijo del expresidente catalán no está obligado a contestar a las preguntas que se le formulen ni tiene obligación de decir verdad, como sí sucede con los testigos.
Pujol Ferrusola, con el rostro oculto tras unas gafas de sol y un traje gris marengo, salió del taxi tan velozmente que nadie fue capaz de identificarlo en un primer momento. En la puerta de los juzgados le esperaban medio centenar de periodistas y un fuerte despliegue policial.
El juez está todavía en espera de recibir la información reclamada a Andorra sobre las cuentas del hijo del expresidente de la Generalitat, y sobre la que la juez que tramita la comisión rogatoria ha advertido a Ruz que sólo se la podrá facilitar si vincula los delitos de blanqueo y fiscales a otros de corrupción como tráfico de influencias o cobro de comisiones ilegales.
Aprovechando la comparecencia de Pujol Ferrusola, el portavoz adjunto en el Congreso del PP, Rafael Hernando, ha apuntado que aunque algunos políticos catalanes han lanzado el mensaje de que "España nos roba", lo hicieron para ocultar que quienes robaban en realidad "eran ellos", una actitud que ha considerado doblemente grave.
http://politica.elpais.com/politica/2014/09/15/actualidad/1410769078_091853.html
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