Más de 200 inmigrantes han sido hallados entre el 23 de octubre y el 5
de noviembre, cuando intentaban cruzar la frontera ocultos en los
residuos llegados a la península por vía marítima desde
Ceuta, según ha informado la policía. La Brigada Central de Respuesta a
la Inmigración Clandestina de la Comisaría General de Extranjería y
Fronteras estableció en esas fechas un dispositivo especial de control
para evitar la inmigración irregular entre los puertos de Ceuta y
Algeciras (Cádiz).
Los extranjeros, la mayoría argelinos que procedían del Centro de Estancia Temporal de Ceuta, se escondían en un barco destinado al transporte de residuos y materiales de deshecho procedente de la Planta de Tratamiento de Residuos de la ciudad autónoma.
Los agentes de Ceuta trataban de controlar la presencia de inmigrantes en los muelles de la ciudad para
evitar que accedieran a las embarcaciones que periódicamente viajan
hasta el puerto gaditano. También, junto a los tripulantes de los barcos
y los empleados de las compañías navieras, inspeccionaban el interior de las naves antes de que partieran.
Ya en Algeciras, los policías se desplegaban en los muelles para controlar que, pese a todo, algún extranjero hubiera llegado a España de manera ilegal.
En lo que va de año, la policía ha denegado el acceso a 3.472 personas que no cumplían los requisitos para atravesar la frontera y ha devuelto a 246 extranjeros.
Ceuta, según ha informado la policía. La Brigada Central de Respuesta a
la Inmigración Clandestina de la Comisaría General de Extranjería y
Fronteras estableció en esas fechas un dispositivo especial de control
para evitar la inmigración irregular entre los puertos de Ceuta y
Algeciras (Cádiz).Los extranjeros, la mayoría argelinos que procedían del Centro de Estancia Temporal de Ceuta, se escondían en un barco destinado al transporte de residuos y materiales de deshecho procedente de la Planta de Tratamiento de Residuos de la ciudad autónoma.
Los agentes de Ceuta trataban de controlar la presencia de inmigrantes en los muelles de la ciudad para
evitar que accedieran a las embarcaciones que periódicamente viajan
hasta el puerto gaditano. También, junto a los tripulantes de los barcos
y los empleados de las compañías navieras, inspeccionaban el interior de las naves antes de que partieran.Ya en Algeciras, los policías se desplegaban en los muelles para
controlar que, pese a todo, algún extranjero hubiera llegado a España de manera ilegal.En lo que va de año, la policía ha denegado el acceso a 3.472 personas que no cumplían los requisitos para atravesar la frontera y ha devuelto a 246 extranjeros.
Un inmigrante sale de entre los residuos de un contenedor transportado en un barco que hace la línea Ceuta-Algeciras. / POLICÍA
la línea Ceuta-Algeciras. / POLICÍA
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